La meditación involucra varios procesos como: enfocar la atención, reconocer cuándo la mente se ha desviado y restablecer el enfoque. Los neuropsicólogos señalan que estos procesos se asocian con tres redes cerebrales de gran escala: una Red de Modo Predeterminada (DMN) asociada a la mente distraída, una Red de Saliencia y Emoción (SEN) asociada con la conciencia centrada en el presente y una Red Ejecutiva Central (CEN) ) que ayuda a cambiar, restaurar y mantener el enfoque. Cuando dos o más redes cambian la actividad de forma coordinada, se dice que están funcionalmente conectadas.
Marusak y col. [Behavioral Brain Research] estudiaron tanto la conectividad funcional media y dinámica entre estas redes cerebrales en niños, como también la forma en que estas redes se relacionan con los niveles de atención consciente y los síntomas de salud mental de los niños.
Los investigadores reclutaron una cohorte de 42 niños y adolescentes diversa tanto a nivel económico como racial de 42 niños y adolescentes. Los participantes completaron cuestionarios de autoconciencia, ansiedad y depresión. Todos los participantes se sometieron a medidas de resonancia magnética funcional (fMRI) en estado de reposo.
Después de efectuar las mediciones, se les preguntó a los niños sobre su pensamiento presente, pasado y centrado en el futuro, así como sobre el pensamiento centrado en sí mismo y centrado en el cuerpo mientras se sometían a imágenes.
Este estudio es importante porque es el primer estudio de atención plena y conectividad funcional dinámica, así como el primer estudio que explora los correlatos neurales y los beneficios de salud mental y la disposición a la atención plena en niños.
Los investigadores identificaron cinco estados separados de conectividad funcional dinámica entre redes. Por ejemplo, el Estado 2 se caracterizó por la conectividad positiva entre el DMN y el CEN, la conectividad negativa entre el SEN y el CEN, y la conectividad negativa entre el DMN y el SEN. En comparación, el Estado 4 se caracterizó por una conectividad positiva entre todas las redes, mientras que el Estado 5 se caracterizó por una conectividad débil entre todas las redes.
Los niveles más altos de Mindfulness Disposicional (tendencia innata al Mindfulness) se asociaron significativamente con niveles más bajos de ansiedad (r = -0.49) y niveles más altos de pensamiento centrado en el presente (r = 0.36). Los niños más conscientes pasaron menor tiempo en el Estado 2 y realizaron un mayor número de transiciones de ida y vuelta entre los cinco estados.
Los niños más ansiosos, por otro lado, hicieron menos transiciones de estado y pasaron un tiempo significativamente mayor en el Estado 2. Estos resultados son consistentes con que los “niños Mindful” o más conscientes son más capaces de reducir la atención de estados errantes y autorreferenciales y redirigirla a estados centrados en el presente y / o centrados en el cuerpo. Esta mayor flexibilidad en la transición entre los estados puede reducir la ansiedad al evitar que los niños se «estanquen» en la rumiación. El hecho de que los niños conscientes pasen menos tiempo en el Estado 2 tiene sentido dado que este estado se asocia a la mente errante o que divaga.